Dir. Alberto Morales
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FE, TRADICIÓN, COLOR Y ALEGRÍA VISTEN A TEOCELO
Sobre la colorida alfombra de aserrín la imagen del Santo Entierro recorre la calle principal de Teocelo, Ver. mientras a su alrededor los devotos danzan en agradecimiento a su patrono, por la protección de su pueblo y su gente.
27/01/2019 - Teocelo, Ver.
Sobre la colorida alfombra de aserrín la imagen del Santo Entierro recorre la calle principal de Teocelo, Ver. mientras a su alrededor los devotos danzan en agradecimiento a su patrono, por la protección de su pueblo y su gente. por Lourdes García
Mágica fiesta en honor al Santo Entierro de Cristo, la primera del año, de otras que tiene este municipio, digno de visitarse en cualquier época del año.
27/01/2019 20:12:28 - Xalapa, Ver. / redacción multigráfica

La devoción religiosa del pueblo de Teocelo, Ver. ha dado pie a que sus habitantes hayan hecho de sus fiestas patronales, algunos de los principales eventos de convivencia y unión entre su gente.
Una de las fiestas patronales, la primera del año, es la que se celebra en honor al Santo Entierro de Cristo, y se lleva a cabo el último fin de semana de enero.
Se dice que la figura del Santo Entierro fue hallada desde una fecha no determinada, en la barranca de este municipio, para de ahí ser llevada a Texín, en donde permaneció hasta hace algunos años atrás de 1900, siendo a partir de entonces trasladado para ser venerado y festejado en la ciudad de Teocelo.
La fiesta religiosa ha dado pie a una serie de actividades que actualmente constituyen un atractivo para cualqier visitante, sea o no creyente.
Las danzas tradicionales, el rito de la elaboración, traída y colocación del arco floral en la entrada de la iglesia principal de la localidad, dedicado a la Asunción de la Virgen; la costumbre de disfrazarse; los tapetes de aserrín de cada barrio, entre otros, son detalles que hacen atractiva la visita a Teocelo durante esta fiesta.
Ejemplar es la forma coordinada en que habitantes y autoridades trabajan, y el fomento y conservación de las tradiciones que se está impulsando con más fuerza en los recientes años.
El arco floral, de un peso aproximado de 3 toneladas y media, es trasportado hacia la iglesia por al menos 60 hombres simultáneamente, pues son muchos más los a lo largo del recorrido sustituyen a otros en la pesada labor, como un pago al patrono, por las bendiciones recibidas.
Con el peso a sus hombros y espaldas a cuesta, los devotos marchan sin rendirse..., y aún hay tiempo para un trago y la risa, al compás de la música.
Las imágenes del Santo Entierro y la Virgen Dolorosa son también portados por los feligreses, los hombres a Cristo en su féretro, las mujeres a la Virgen en andas.
Y alrededor de esta devoción religiosa, los Tocotines danzan, al igual que los Payasos, cientos, miles de payasos, pues además de los ejecutantes profesionales de esta danza, los teocelenses tienen la tradición de acompañar las procesiones ataviados con los trajes y máscaras típicas de esta danza.
Al igual que en todo México se acostumbra vestir alguna vez a los niños de inditos e inditas para visitar a la Virgen de Guadalupe, en Teocelo es tradición vestirlos de payasos para acompañar al santo Patrono.
Esto, acompañado de música y alegría, imprime colorido a la fiesta que recorre la calle principal.
Y como si se tratara de un carnaval, los teocelenses acostumbran también los disfraces, pero con la característica de alejarse de imágenes comerciales y modernas, para buscar en su propio entorno lo que distingue a la tierra de sus amores.
Aves como el tecolote, el Pepe, el Tucán, la Chachalaca y los pájaros oropéndolas, y otros animales como el oceote, el toche y hasta grillos y hormigas, acompañan la procesión, con la característica que de años atrás han tenido los habitantes de esta verde tierra, estar elaborados con materiales naturales, y que no contaminan la tierra.
Una planta de plátanos circula también por la calle, acompañado de su cortador; y hasta el Pocito de Pajaritosy su aguador hacen presencia en la fiesta.
Todos alegres, agradeciendo al Patrono, en sólo una de las hermosas fiestas, del mágico pueblo, sin necesidad de título oficial, que es Teocelo, Veracruz.